Esta noche he soñado que mi duende y yo nos cambiábamos de casa, que vendíamos nuestro mini-caja-de-zapatos y comprábamos la casa que tiene en venta su padre. Esa es su ilusión y, de vez en cuando, creo que no es una idea tan alocada...
Esta noche soñé con que eso se hacía realidad y veía esa casa triste y gris, convertida en una casa IKEA, llena de color y de alegría. Le conté, en uno de esos trayectos en coche que echo de menos y que hacía mucho que no sucedían, cómo era el sueño... y entre esas cosas, le conté cómo era la habitación del bebé (azul con una cuna blanca... con una nube azul). Me miró y me preguntó todo convencido: "¿Tus sueños se cumplen?" y, en el momento antes de contestarle, pensé: "Sí, siempre que tú quieras que se cumplan" pero le dije: "A veces sí y otras no"
... De cumplirse... ¡¡ya hubiera comido el morro al Duque :D!! (qué mala soy) (OYE, un sueño, es un sueño...).
martes, 8 de abril de 2008
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